Noche de verano, calor en el ambiente…
Noche de verano, pensamientos asaltan mi mente…
Noche de verano, un deseo nace en mi…
El placer me llama y me pide que acuda…
El deseo quiere ser manifestado y precisa ser sentido…
La mente vuela buscando imágenes que lo acompañen…
Y recuerdo sus palabras…
Y recuerdo lo con ellas me incitaba…
Y recuerdo lo que eso me provocó…
“¿Sabes…?,
jugaría contigo a un juego...
pondría trocitos de fruta por todo mi cuerpo…,
trocitos pequeños...de diferentes sabores…
en mis labios…
en mi cuello …
en mis brazos…
a mis senos, los cubriría de fresas…
a mi vientre, con algunos trocitos de pera dulce…
a mi ombligo trocitos de fresco melón...
a mi pubis, sobre mi sexo, cerezas picadas...
y a mis ingles…
a mis ingles, las cubriría con miel…”
Y sus palabras terminan de encenderme…
Y sus palabras me llevan a imaginar y sentir…
Y sus palabras me llevan a gozar con ella…
“Pues ante esa bella imagen…
ante tu cuerpo desnudo con sensualidad…
ante tu cuerpo cubierto de dulces frutas…
sólo podría ir comiéndolas una a una...
las de tus labios…
las de tu cuello…
las de tus brazos…
las de tu vientre…
las de tu ombligo…
las de tus senos…
y esas fresas serían la ultima fruta...
para saborear su dulce acidez…
antes de seguir recorriendo tu piel…
en busca del jugo mas preciado…
Noche de verano, pensamientos asaltan mi mente…
Noche de verano, un deseo nace en mi…
El placer me llama y me pide que acuda…
El deseo quiere ser manifestado y precisa ser sentido…
La mente vuela buscando imágenes que lo acompañen…
Y recuerdo sus palabras…
Y recuerdo lo con ellas me incitaba…
Y recuerdo lo que eso me provocó…
“¿Sabes…?,
jugaría contigo a un juego...
pondría trocitos de fruta por todo mi cuerpo…,
trocitos pequeños...de diferentes sabores…
en mis labios…
en mi cuello …
en mis brazos…
a mis senos, los cubriría de fresas…
a mi vientre, con algunos trocitos de pera dulce…
a mi ombligo trocitos de fresco melón...
a mi pubis, sobre mi sexo, cerezas picadas...
y a mis ingles…
a mis ingles, las cubriría con miel…”
Y sus palabras terminan de encenderme…
Y sus palabras me llevan a imaginar y sentir…
Y sus palabras me llevan a gozar con ella…
“Pues ante esa bella imagen…
ante tu cuerpo desnudo con sensualidad…
ante tu cuerpo cubierto de dulces frutas…
sólo podría ir comiéndolas una a una...
las de tus labios…
las de tu cuello…
las de tus brazos…
las de tu vientre…
las de tu ombligo…
las de tus senos…
y esas fresas serían la ultima fruta...
para saborear su dulce acidez…
antes de seguir recorriendo tu piel…
en busca del jugo mas preciado…
Sin duda esa macedonia me encantaría...
y la saborearía con un placer muy especial…
llegando a tu pubis… a esas cerezas...
y cuando terminase con ellas...
y terminase por lamer la miel de tus ingles...
y tras haber recorrido todo tu cuerpo con mis labios...
y tras haber saboreado cada fruta esparcida por ti...
y tras haber comido esas fresas ácidamente dulces…
y tras sentir la calidez de tus senos en mis labios…
y tras sentir la tersura de tu pezón en mi lengua...
y tras unos suaves roces de mi lengua en tus ingles...
y tras todo ello...
mis labios, mi boca, mi lengua…
deleitadas con tantos dulces manjares...
buscarían sentir el mas dulce de los néctares..
el mas sabroso de los frutos..
y mi cabeza se deslizaría entre tus piernas…
para que mis labios pudieran unirse a esa intimidad tuya…
y entre besos calidos de placer…
mi lengua saborearía la cálida humedad de tu sexualidad mas íntima…
sin dejar de besarte y rozarte…
mientras mis manos recorrerían tu cuerpo…
hasta que en ese placer extasiante…
saboreando el fruto ácidamente dulce de tu sexo…
tu sintieras el éxtasis del placer…
que te llevaría hasta el orgasmo…
ese orgasmo, intenso, sentido, deseado...
y que haría de mi…
el hombre mas feliz que pueda existir...
porque lo mejor que podría pasar.. habría pasado…”
Y así, con ella en mi mente…
Y así, con sus palabras en el recuerdo…
Y así, con su imagen sensual estimulándome…
La noche de verano me ha llevado al placer…
La noche de verano me ha llevado a gozar...
La noche de verano me ha llevado a ti…
el hombre mas feliz que pueda existir...
porque lo mejor que podría pasar.. habría pasado…”
Y así, con ella en mi mente…
Y así, con sus palabras en el recuerdo…
Y así, con su imagen sensual estimulándome…
La noche de verano me ha llevado al placer…
La noche de verano me ha llevado a gozar...
La noche de verano me ha llevado a ti…
6 comentarios:
Increible tu relato...pasaré para releerlo de nuevo como se merece; traquilamente y consciente de cada palabra que escribes.
Uffff, una macedonia tan exquisitamente apasionante; quien no la quiere de postre...
Besos tiernos y dulces, y llenos de todos esos sabores.
Volveré a leerte otra vez. Vale la pena.
** MARÍA **
¡¡Xasel!! pero que postre mas exquisito...
Besos
Llego de nuevo a tu espacio...
Dulzura en la palabra, dulzura en la mente; tu mente dulce y jugosa al escribir con exquisitez un momento tan íntimo.
Y el recorrido lo haces apasionadamente dulce con una variedad de frutas tan apetitosas que hasta el más negado para la fruta no le pondría excusas, y se comería una a una, trocito a trocito...saboreando con placer y con gusto, dando placer y gusto.
Eres perfecto para preparar una macedona perfecta; sólo la copa donde la prepares y deleites con con sus colores, texturas y sabores...tiene que derretirte ante tanta belleza.
Me parece uno de los post más apetecibles a los sentidos que has escrito y yo, he leído, Xasel.
Seguiré llegando a este espacio plagado de tu "Morbo y sensuaildad"...en las etiquetas, te falto decir también "sensibilidad" a mí me da que tienes mucha ;)
Besos tiernos y dulces para ti.
** MARÍA **
Como siempre es un placer descubrir en tus letras esa sensualidad, ese placer, ese deseo por sentir...que ricas son esas macedonias...
Besitos dulces..
xasel***me apunto después de leerte,un beso con sabor a fresas.
Tan solo te dejo...un beso
:-)
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